Los vuelos espaciales en órbitas bajas de la Tierra son cada vez más frecuentes, aunque los aviones cohete no son un concepto nuevo, pues se lleva experimentando con ellos desde finales de los años sesenta. China tiene mucho que aportar en este campo con sus últimas pruebas e investigaciones en reactores de ciclo combinado.
El nuevo concepto de nave espacial china sería capaz de despegar de una pista de aterrizaje regular, alcanzar velocidades supersónicas, entrar en la órbita de la Tierra, y volver a aterrizar de nuevo en la misma pista estando listo para repetir el proceso.
Este avión espacial proviene de la Tecnología desarrollada por el departamento de la Corporación y Ciencia Aeroespacial de China. Su diseño permitirá el despegue horizontal el cual estará propulsado por un motor turboventilador o turborreactor, seguido de un motor estatorreactor que impulsará el avión hacia arriba, a través de las capas altas de la atmósfera. A medida que la nave espacial alcanza velocidades supersónicas, entonces se cambiará a un motor scramjet que empujará la nave a través de la parte del "espacio interior" de la atmósfera que se encuentra entre los 20 kilómetros a 100 kilómetros sobre el nivel del mar. Una vez que se encuentre cerca del espacio, el ingenio aeronáutico, finalmente, hará uso de sus motores cohete de a bordo para maniobrar en la órbita.
Referencias: PopSci y digitaltrends
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