La empresa Deepflight submarines es el resultado de cuarenta y cinco años de experiencia innovando en los vehículos submarinos más avanzados del mundo. Dirigidos por Hawkes Graham, un ingeniero naval británico encargado de la construcción y pilotaje del Hydrobatic que apareció en la película del año 1980, James Bond sólo para sus ojos. Hawkes es el responsable de la fabricación del Deepflight Super Falcon Mark II que ha sido completamente reconstruido tras el éxito de su predecesor, el Súper Falcon Mark I.
El vehículo nos ofrece como el piloto o pasajero la posibilidad de viajar por las profundidades de un mar sin límites, tienes la libertad de ir acompañado de delfines, surcar el interior del mar junto a una ballena gris y tiburones o de sumergirte en el abismo para la exploración en aguas profundas.
Dispone de un soporte vital de electrónica avanzada, como controles con botones y una pantalla gráfica intuitiva que facilita la comunicación para volar a través de agua, lo que permite a los usuarios centrarse en el viaje y las bellas vistas. Incluye características de los submarinos más avanzados como luces y campos electromagnéticos para surcar profundidades sin ser molestados. La nave está equipada con baterías de iones de litio para proporcionar una marcha silenciosa y eficiente con cero emisiones.
El diseño de las alas patentado `por Deepflight es capaz de operar en profundidades de hasta a 11.000 metros.
Vista posterior de Deepflight Súper Falcon
La artesanía única es boyante, lo que significa que puede automáticamente flotar sobre la superficie sin problemas.
Cabina interior del Deepflight Súper Falcón.
Vía: designboom
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